By Carmen | 10 Sep 2017
Un postre para agasajar a nuestros invitados o para mimar a nuestros seres queridos. Si te ánimas puedes conseguir hacerlo todo casero. Lee la receta y verás.
500 g de mascarpone casero
3-4 cucharadas soperas de dulce de leche según lo queramos más o menos dulce
1 vaso de café cargadito
Un bizcocho cortado en bastones o bizcochos de soletilla
Pepitas de chocolate a gusto de la cocinera (optativo)
Chocolate sin leche rallado para cubrir o cacao en polvo
By Carmen | 10 Sep 2017
Un postre para agasajar a nuestros invitados o para mimar a nuestros seres queridos. Si te ánimas puedes conseguir hacerlo todo casero. Lee la receta y verás.
1. Preparamos una cafetera con buen café. Necesitamos un vaso aproximadamente para mojar bastones de bizcocho o los bizcochitos de soletilla*. Una sugerencia, si no hay niños podéis ponerle una chorrito de ron al café y no olvidéis de echarle azúcar. Os aconsejo probarlo con bizcocho. Yo en ocasiones hago un bizcocho grande y congelo parte. De esta forma si no lo vamos a comer todo evitamos que se estropee. Así que he utilizado bizcocho congelado cortado en tiras como si fueran soletillas.
2. Cogemos una fuente. Ponemos una primera capa de bizcochos mojados en el café, después otra generosa y abundante capa de mascarpone* con dulce de leche. A continuación pepitas de chocolate. Es muy agradable encontrarse con estos tropezones. Continuamos con otra capa de bizcochos, otra de mascarpone, pepitas de chocolate y para rematar chocolate rallado o cacao en polvo al gusto.
3. Dejamos en la nevera unas horas antes de consumir, personalmente me gusta hacerlo de un día para otro.
Tienes la receta del mascarpone aqui y de los bizcochitos de soletilla aqui.