1.Precalienta el horno a 190º C. Engrasa el molde con un poquito de mantequilla. Reserva

2. Lava las cerezas y quitales el hueso. Corta por la mitad y coloca en la base de la fuente. Si le quieres echar azúcar reparte sobre la fruta. Aunque si la fruta está madura no es necesario ponerla.

3. Pon la harina, levadura, sal, azúcar en un cuenco y mezcla.

4. Incorpora la mantequilla en dados y integra con la batidora hasta que este todo mezclado.

5. Incorpora el huevo y mezcla con una espátula o cuchara de madera hasta conseguir una masa homogénea.

6. Pon la masa a cucharadas encima de la fruta, dejando hueco entre cada cucharada, no la iguales ni niveles, de esta forma quedará algún hueco por el que se vea la fruta, ahí está la gracia!

7. Introduce en el horno y hornea 35 minutos o hasta que tome color bien dorado.

SUGERENCIAS Y CONSEJOS:

-Puedes hacerlo con cualquier tipo de fruta, yo te aconsejo utilizar fruta de temporada, ahora en verano hay multitud de posibilidades: cerezas, fresas, albaricoques,  melcotones ….

– Se suele tomar recién hecho o templado. A mi también me gusta frío y lo puedes acompañar de helado o yogur cremoso.

-Una de mis combinaciones favoritas es: una base de yogur griego con un par de cucharadas grandes de cobbler.

-Se puede congelar una vez hecho y frío.

-Las cantidades las puedes adaptar al número de comensales/tamaño del molde. Para ello utiliza la siguiente regla:

Por cada huevo L

 Su peso de harina

Su peso de azúcar

 El doble de mantequilla

1/2 cucharadita de levadura de reposteria